lunes, 5 de marzo de 2012

El carácter de Manny


Manny Ramírez firmó un contrato de 500 mil dólares con los Atléticos de Oakland, pero como el dominicano dio positivo en el control antidopaje, tendrá que cumplir una sanción de 50 juegos, antes de pararse en el plato y tomar un turno en esta campaña. Al parecer Billy Bean y su sabermétrico tienen confianza en que, el jardinero de 39 años, todavía pueda tener buenos turnos al bat.

Ramírez inició su carrera en la gran carpa, con los Indios de Cleveland. En el 2001 pasó a formar parte de los Medias Rojas de Boston, equipo donde tuvo sus mejores años, pero tuvo muchos problemas con la oficina que dirigiera Theo Epstein. Para el año 2008, defendió los colores de los Dodgers de Los Ángeles, en el 2010 tuvo un año muy por debajo de su nivel con los Medias Blancas de Chicago y el año pasado defendió la casaca de las Mantarrayas de Tampa Bay, pero anunció su retiro después de salir positivo, por segunda vez en su carrera, por usar sustancias prohibidas, resultándole 100 juegos de castigo. Trató de jugar en la liga invernal, peo el comisionado de la MLB lo impidió.

Los números del dominicano son impresionantes, tiene en su haber 555 palos de vuelta entera, 2,574 imparables, 1,831 carreras producidas y un porcentaje de bateo de .312. Pero también tiene dos ocasiones en que salió positivo en el uso de sustancias prohibidas, entonces ¿serán validos esos números?.

Otra cosa que siempre ha llamado la atención del pelotero es su mala actitud en el campo de juego. En el 2003 estaba en la lista de lesionados y se perdió varios juegos debido a una faringitis, pero una noche lo encontraron en un bar, cuando supuestamente debía estar descansando. En el 2005 cuando todavía jugaba para Boston declaró que no quería jugar para los Medias Rojas y amenazó con no presentarse en los campos de entrenamiento. Posteriormente, en el 2008 tuvo un altercado con Kevin Youkulis mientras jugaban contra los Matarrayas; al parecer Youkulis le reclamó a Ramírez por un batazo que no atrapó, lo que desencadenó una serie de conflictos entre el tercera base y el jardinero. En otra ocasión, Manny discutió con el gerente de viajes de los bostonianos, al cual empujó, haciéndolo caer. El 25 de julio, después de estar sentado en la banca con un dolor en la rodilla durante un partido contra los Marineros de Seattle, Ramírez fue alineado para iniciar contra los acérrimos rivales Yankees de Nueva York. Poco antes del juego, Ramírez le informó al mánager Terry Francona, a través del coach de banca, que no estaría  listo para jugar porque su dolor de rodilla era intenso. Durante la serie, Manny fue llevado a un hospital donde le practicaron una resonancia magnética en ambas rodillas; los resultados no mostraron daños, lo que nos hace pensar que se tiró a la lona. Cuando volvió a jugar, se notaba muy displicente cuando trataba de atrapar elevados.

El año pasado tuvo un contrato de 2 millones de dólares, pero sólo jugó 5 juegos terminando con un porcentaje de bateo de .059. Para esta temporada Manny, buscará tener un mejor desempeño y mejorar su carácter para ayudar a los Atléticos a llegar a la postemporada, pero primero tendrá que cumplir con esos 50 juegos de castigo.

Ya lo dijo Yogui Berra: “¿Pensar? ¿Cómo diablos se puede pensar y batear al mismo tiempo?” hasta la próxima.

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